30/8/13

Buscador de humo

De profesión soy buscador de humo.
Huyo de los caminos transitados de civilización latente y me agazapo a la salida de las ciudades bulliciosas, esperando el desplome.
El absurdo final es extrañamente inevitable y matemáticamente predecible.
Cuando los buitres terminan con su festín yo recojo todo el humo que queda.
Vivo de la desgracia humana y me alegro con el fallo existencial de mis semejantes.
Después de cada caza, le vendo el humo al viento, que lo reparte, y a mi me paga con una pequeña porción más de vida en libertad y otro día más de peaje por vivir de prestado en un mundo antaño totalmente maltratado.